Tiempo (Aportación de Enemey)

La linea del tiempo se tuerce,
y entre los oscuros abismos de la eternidad,
una rosa teñida de sangre florece,
reflejando el duro color de la realidad.
Tus curvas marean mis sentidos,
y la luz de tus ojos me ciega,
mi piel refleja los hechos ya vividos,
y mi paciente mirada espera, a ver si la muerte llega.
La linea del tiempo se tuerce,
y tu piel hace de lienzo en mi infinito,
quisiera ser una rosa que florece,
pero solo pienso en ser un mito.
Tus curvas marean mis sentidos,
y mis leves suspiros destruyen los castillos de arena,
que la niñez construyó con latidos,
de un corazón que envejece con la pena.
Ayer florecía y hoy se marchita,
ayer mareaban, hoy solo queda el recuerdo,
hoy solo queda el eco de una voz que grita,
hoy pienso en cuando aún estaba cuerdo.
Ayer el río desbordaba su cauce,
hoy observa como la linea del tiempo se tuerce.

Alas de plástico (Aportación de Oriol)

Grabación de audio,
sonido de un río,
globalizando el tiempo
que me envasaste al vacío.

Reflejo e ilusión:
el musgo florece tus piernas;
sobre cerrado en botella,
botella que vuela y revienta

Palabras grotescas;
tormenta, entrepierna, sol,
mil nubes y en la luna la niebla.

Caras desenterradas,
calaveras y tierra.
Madre tierra enojada,
útero, mirada mojada.

En tu sombra la luz descansaba,
luz de astros y en tu piel, las montañas.
Corrupción poluta, fronteras de un mundo;
mapas, juguetes de guerra, billetes vagabundos.

El océano vomitaba tu rabia.
El hombre en sus grilletes se asfixiaba.
Comida basura, pobreza, desgracia.

Oriol Mayàns.

Crónicas del olvido.

Otra noche en blanco,

otra vez el folio lleno de mierda,

otra vez recordando tus poemas,

recordando tu risa,

recordando tus labios.

Y es que perdería hasta el OCB por estar a tu lado.

Yo, que no soy más que dudas y complejos,

me envuelvo en tu luz y me crezco,

rebaso los límites de cualquier ciencia,

y reviento paredes pensando que detrás de ellas te encontraré a ti.

Pero sólo veo vacío,

ni una sonrisa,

ni un guiño,

ni siquiera una palabra de aliento.

Me toca retroceder corriendo,

las paredes se abalanzan sobre mí,

y tus palabras de indiferencia me arrancan la piel a bocaos.

Pero lo daría todo, por estar a tu lado;

moriría sin pensarlo, por abrazarte;

mataría porque me sostuvieras la mirada;

e incluso robaría la luna,

pa' que vieras que hasta ella

envidia tu luz.

Nada personal

No te deseo ningún mal,
pero ojalá se pudra todo lo que sueñas,
ojalá lo que desees nunca se llegue a cumplir,
ojalá tu conciencia no te deje dormir.
No te deseo ningún mal,
pero ojalá despiertes un día cualquiera,
y veas que alguien destrozó todo lo que podías sentir,
ojalá que nunca puedas sonreír.
No te deseo ningún mal,
pero ojalá tu barco nunca llegue a puerto,
ojalá la brisa marina nunca sople sobre ti,
ojalá que tu cabeza nunca pueda descansar,
que se muera tu alegría y tu energía vital,
que nunca encuentres paz ni libertad.
Pero recuerda, no es nada personal.

Luego piden redención.

En plena Calle Mayor,
se ha parado un corazón.
Pero nadie se ha girado,
"menos mal que no he sido yo".
En la casa del señor
otra violación,
otro niño, para siempre, trastornado.
Luego piden redención.
En el banco otro ladrón
de corbata y de sillón,
se ha aprovechado de un viejo,
que no leyó lo que firmó.
En comisaría, otro "terrorista",
acusado de cantar en el suelo de la Gran Vía.
Luego piden redención.
Una madre con sus hijos,
su familia, su esperanza,
cruelmente desahuciada.
Nadie dice nada.
En aquel rincón, otra agresión
a una mujer que ejercía su derecho a decisión.
"Ellas se lo van buscando", dicen por televisión.
Luego piden redención.
En el colegio se defiende al matón,
se ridiculiza al empollón,
al gordo, al afeminado, al narizón.
En el pueblo se respeta la tradición,
empalar a un toro por vocación,
"Para eso nació,
no matarlo sería su extinción."
Luego piden redención.
Empresarios, sin razón, despiden a un señor,
treinta años trabajando como un cabrón,
y sin derecho a pensión.
Otra reunión alcalde-costructor,
para rifarse las tierras del agricultor,
para construir otra urbanización,
"es para mi hijo el mayor".

Luego piden redención.

Delgada línea (PMM)

Siempre he sido de pensar que demuestra más cariños un mordisco que un beso.
Él me lo enseñó.
Nunca fue un Christian Grey, pero ha sido a lo que más se ha parecido.
Nunca me flageló, ni me esposó, ni me suplicó de rodillas que no le tocara el torso, ni me hizo tocar el cielo de esa manera...
Simplemente me mordía, me mordía de forma tan dulce y lujuriosa, con una mezcla de dolor y placer, tan perfecta que rompía la delgada línea entre ambos haciendo que me retorciera, no se aún si para que parase o siguiera.
Era capaz de hacer que me acordara de él durante dos semanas al mirarme al espejo y verme llena de marcas,
por no hablar del dolor que sentía en el cuello al ponerme la mochila, al tener que llevar fular en pleno junio, al escuchar de la voz de otros que mis labios estaban morados, o al ver que todas mis camisas y chaquetas tenían marcas de maquillaje en los cuellos...
Pero no, no me importaba, sólo era el precio a pagar por todo lo que había ganado a su lado.

PMM

Querencias (Con Irene BV)

Irene.
Quiero desnudarte, esnifarme cada uno de los pelos que componen el bello de tu culo en las noches en las que aprieta el frío.
Quiero susurrar en tu boca el gerundio de besar sin temor a congelarme, quiero escuchar de nuevo esa canción que me grita tu cuerpo cuando encaja junto al mio.
Quiero un millón de preguntas, ofrecer alguna respuesta, quiero pedirnos perdón.
Quiero reducir a cenizas todo lo que un día acabó con nosotros.
Quiero meterme en vena tus caricias, tus mentiras, tus besos y tus poemas de bohemia.
Quiero poder picarte, liarte y fumarte cada noche, cada día, cada instante.
Quiero poder despertarte, amarte, poder lamer cada milímetro de tu cuerpo.
Quiero demasiadas cosas, pero principalmente, 
te quiero aquí.
Ales.

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